Rayuela...


Quisiera volver al sendero de tiza, a sus tiernos cuadritos de la tierra hasta el cielo.
Quisiera el eucaliptus aromando mis juegos.
El campanario lejano cantando solito.
El perfume a pasto cortado.
Las mariposas en verano.

Quisiera mis muñecas y los mágicos crayones...
La mano de papá camino a la escuela y las de mamá arropando mis sueños...

Necesitaría a Marita invitándome a jugar.
A la abuela María batiendo una yema...
Necesitaría trepar a la morera o robar una ciruela del ciruelo de al lado...
Necesitaría el silencio de mi barrio dormido.

Quisiera recuperar mi vieja goma de borrar para esfumar el hoy de esta hoja del cuaderno y una tiza blanca para dibujarme otra rayuela en el corazón...